Esta semana, Infobae publicó en su página web un artículo que alertaba sobre los peligros que acechan a la activa juventud argentina con un término interesante: “extasis adulterado”.

En una sociedad castigada por las tragedias relacionadas al mundo de las drogas, en medio de un fenómeno que sigue en aumento –el consumo de extasis creció un %1000 en los últimos diez años-, aparece una nueva categoría que se plantea: el agregado de otras sustancias a los comprimidos que, a simple vista, parecen puras pastillas de MDMA.

Las drogas adulteradas traen aparejados muchos más peligros que el consumo de sustancias originales y, según el informe que publicó Infobae, esto podría estar en claro aumento en nuestro país, donde se han encontrado comprimidos con sustancias agregadas, nocivas para el organismo y que hasta podían ser fatales.

Por años, el MDMA ha sido la sustancia elegida por los fanáticos del mundo electrónico que eligen adulterar sus sentidos, no sólo en Argentina sino en todo el mundo. Con la capaciad de desinhibir a la gente y aumentar los niveles de exitación a través de la liberación de serotonina, es el componente principal que se encuentra en las pastillas que, comunmente, llamamos éxtasis. Pero, al parecer, de un tiempo a esta parte, ha dejado de ser el único componente activo.

Infobae se acercó a la médica psiquiatra y experta en adicciones Geraldine Peronace para escalerecer acerca de estos peligros a la hora de consumir estas sustancias y las adulteraciones que están sufiendo. “Dentro de los comprimidos se han encontado MDMA, que es el principio activo del éxtasis, acompañado de cocaína, ketamina y PMMA», alertó y, principalmente, puso énfasis en lo que, para ella, es el principal problema del país: el policonsumo.”No solamente por la cantidad de sustancias que hay en el mercado, sino el policonsumo dentro de un solo comprimido», explicó.

«Dentro de los riesgos de este consumo, el cuadro primario tiene que ver con un sindrome serotoninérgico. Esto va a aumentar la temperatura corporal, la persona va a tener hipertemia, taquicardia, arritmia, aumento de la presión arterial. Y pueden tener hemorragias cardíacas y cerebrales y llevando esto a la falla multiorgánica y llevando esto al paro cardiorespiratorio. Sumado a esto, la importancia de los cuadros pisquiátricos: esquizofrenias, psicósis agudas tóxicas, que comprenden delirios, alucinaciones, conducta paranoide, ideación suicida, en muchos casos ataques de pánico, cuadros de extrema ansiedad y angustia», finalizó la especialista.