La escena electrónica tiene una buena reputación respecto a unir gente de diferentes clases sociales, etnias y culturas pero muchos suelen marcar los problemas que existen respecto a la misoginia, algo que volvió a ponerse en tela de juicio luego de que Sarah Ginn, una de las más reconocidas fotógrafas de la cultura de club haya decidió renunciar a su principal labor.

Resulta que Ginn, fotógrafa del club por más de diez años, anunció a través de un comunicado en Twitter que dejaría de trabajar en el mundo de la música electrónica debido a la misoginia y al bullying que ha enfrentado a través de los últimos tres años dentro del club.

“No sirve hacer un trabajo para que te juzguen por cómo te ves”, expresó en su texto. “¿No soy una persona? ¿Es mi cuerpo lo único importante?”, trató de figurar en sus palabras. Lo cierto es que la reconocido fotógrafa, que trabajó además con compañías como Red Bull Music Academy y Defected Records confirmó su partida, luego de los shows que queden en 2017.

“Si no soy respetada por la gente a la que fotografío como un igual, no puedo hacerlos ver increíbles. Moralmente, está mal que mis imágenes sean una mentira. Esto sólo aplica a un pequeño porcentaje de la gente a la que he fotografiado pero lo suficiente como para decidr parar”, agregó.

Mira el comunicado completo. ¿Qué opinas?