Pocas veces tenemos la suerte de ver una entrevista extensa donde el artista de origen chileno deje tantos comentarios interesantes condensados. Eso pasó en su última entrevista para el medio inglés The Guardian, donde habló de su pasión por el DJing, de la diferencia de clases y de su faceta como padre.

Uno de sus principales comentarios, tuvo que ver con su idea del dancefloor como un espacio para la comunión entre individuos. «La música une a las clases, siempre que la pista sea mas grande que el VIP», expresó y siguió con una analogía. «En un partido de fútbol, tienes lo mismo. Está el presidente sentado en el espacio para gente importante y tienes a todos los demás mirando pero, de pronto, están todos actuando igual y Angela Merkel está saltando como un hooligan. Y esto pasa también en las fiestas.»

Además, con una frase contundente, expresó el porqué de su vocación. «Yo soy un bailarín y no quiero bailar solo. ¡Por eso soy DJ!», aseguró y fue contra la actualidad de la escena: «No es que puedas volverte un DJ a los 20 años porque piensas que es cool. Es algo que te moviliza, lloras al escuchar un ritmo. Yo, estoy llorando todo el tiempo.»

«Socializar es más importante que mezclar dos tracks, para mantener la conexión con la escena», disparó, también, entre sus claros comentarios, y habló sobre su familia y el presente que vive. «Es difícil para mí irme a casa, y no seguir socializando. Pero dormir es, por lejos, la mejor droga del mundo y los niños son una realidad a la que no puedes escapar. Son mi obligación social, y una bien saludable. Me dan un límite que, hasta ahora, no tenía. Tengo que ser padre, no me puedo morir ahora. Entonces, digo ‘son las 10 am, tengo que ir a casa’. Quizás, otros padres piensan ‘son las 10 pm, debería ir a casa’, pero ya sabes», explicó.

Siempre interesante, contó además porqué se fue a Alemania con sus padres y cómo se involucró en la electrónica a través de Depeche Mode. Lee la entrevista completa aqui.