En el corazón de América Central, donde la naturaleza vibra con intensidad y la cultura florece en cada rincón, se gesta una nueva propuesta que promete elevar el nivel de la vida nocturna en la región. Costa Rica —uno de los destinos turísticos más visitados de Latinoamérica— está a punto de sumar a su oferta en la escena electrónica: 

Û Kóko, un elegante club que abrirá sus puertas a finales del mes septiembre del presente año y que desde ya perfila una narrativa ambiciosa, sofisticada y profundamente conectada con la escena electrónica global.

Û Kóko no se proyecta como un espacio más: su diseño y propuesta sofisticada están pensados para posicionarse rápidamente entre los clubes más influyentes de Latinoamérica y, en menos de 12 meses, entrar al radar de los mejores del mundo. La sala —con una capacidad íntima de 350 personas— se equipará con un sistema de sonido Funktion-One hecho a medida, pensado para exaltar cada frecuencia con claridad quirúrgica y bajos con presencia absoluta. La iluminación y visuales estarán a cargo de los mismos equipos que han trabajado para Tomorrowland, Zamna y Cercle, con un diseño encabezado por Explosure y Black Box, referencia obligada en la producción audiovisual del continente.

Ubicado en San José, Û Kóko combina tecnología, diseño y programación curatorial con una mirada de largo aliento. Su calendario, que se revelará próximamente, incluirá una cartelera rotativa con lo mejor del circuito internacional. Entre los primeros nombres confirmados: Anton Khabbaz, Chambord, Cioz, Lehar, Dor Danino, Emanuel Satie, Frankey & Sandrino, Guy Mantzur, Ivory, Kadosh, Lazare, Miramira, Musumeci, Nico Morano, Paso Doble, Re.you, Rigopolar, Superflu, además de una apuesta constante por talentos emergentes y selectores locales.

El concepto se afianza en una curaduría segmentada e inteligente: viernes pensados para ampliar el espectro del público, y sábados para vibrar en frecuencias más intensas. El objetivo es claro: educar al oído, seducir al cuerpo y alimentar el alma. Poco a poco, el club irá extendiendo su programación para convertirse en un espacio activo todos los días, sin perder su esencia: excelencia sonora, inmersión estética y comunidad.

y eso es precisamente lo que promete: un nuevo hogar para los sonidos que queman y renuevan, para la comunidad que busca más que fiesta: una experiencia profunda, vibrante, inolvidable.

La energía será creciente: a tres meses de su apertura se anunciará el primer festival, y más adelante llegará el siguiente paso: un club de playa en Guanacaste, con el espíritu de Ibiza y la calidez del trópico latino.

Sin mostrar una sola imagen, el misterio ya genera eco. Û Kóko no enseña: provoca. Y eso es apenas el comienzo.