No todos los días un proyecto personal cumple diez años. Sin embargo, el jefe de Suara no se queda con lo vivido y mira hacia adelante. En medio de una transición que busca llevar a la plataforma hacia terrenos más underground, donde Coyu se siente más cómodo, charlamos con el catalán para conocer un poco más sobre su presente, su visión acerca del techno y los planes de lanzar su primer álbum de estudio.
¿Cómo anda todo?
“¡Muy bien! Aquí, en casa. Día de entrevistas…”
¿Cómo son los días de entrevistas? ¿Cansan un poco?
“Sí, la verdad es que no me gusta. No lo sé. Supongo que es porque suelen preguntar siempre lo mismo. Entonces, siempre es un poco agotador. Además, yo comencé como periodista musical y sé lo que es. Sé sobre el trabajo previo y por eso las hago pero, sinceramente, no soy muy fan. Estoy mejor en el estudio. No es algo que me entusiasme, la verdad.”
Sos, más que nada, un músico. No todos tienen los mismos deseos.
“Realmente, a mi me gusta hablar con la gente. Me gusta explicarme y me gusta que la gente, si quiere saber de mi, yo poder explicarles. Pero, lo que pasa es que, a veces, las entrevistas se hacen muy pesadas porque hay entrevistadores cuyas preguntas son bastantes similares y tener que andar respondiendo lo mismo se hace un poco pesado, pero es parte del trabajo.”
¿Qué te gustaría que salga de esta ronda de entrevistas? ¿Qué te gustaría que se conozca o salga a la luz?
“En realidad, cualquier cosa que la gente quiera saber de mi. Sí que es cierto que ahora estamos en una ronda de entrevistas hablando sobre los diez años de Suara. El 10 de julio se cumplieron diez años del primer release del sello. También, estamos hablando del álbum que va a salir. Hace muchos años estoy trabajando en este álbum. Es mi primer álbum y ya lo estoy acabando. Estoy muy entusiasmado porque en breve lo tendré. Y, a partir de ahí, lo que deseen.”
Empecemos con Suara. En primer lugar, ¡felicitaciones! Está buenísimo que haya sellos que cumplan este tipo de hitos. Lo que tiene Suara en particular es que no es el mismo Suara de cuando empezó. Cambió mucho..
“Bueno, la vida cambia. Todo cambia y, obvio, el Suara del 2008 no tiene nada que ver con el Suara del 2014. Y, el Suara del 2014, no tiene nada que ver con el Suara del 2018. El sello ha cambiado, la marca ha cambiado. ¡Yo he cambiado! Cambiado o evolucionado, puedes utilizar la palabra que quieras. Desde hace unos años estamos en una transición donde el sello está yendo hacia un sonido más maduro, más underground, menos convencional. Un sonido que no se ajusta tanto a las reglas preestablecidas que hay en este negocio, hoy en día. Un sonido que se aleja del convencionalismo. Porque hemos estado ahí y ya hemos pasado por ahí. Ya hemos sido un sello súper rentable, el sello que más vendía de tech house, y me cansé de todo eso y quise ser yo mismo. Quise mostrarle a la gente lo que realmente soy, lo que considero que realmente tiene que ser Suara. Aún estamos en eso, no lo hemos conseguido. Aún estamos editando música de la cual yo no estoy 100% convencido pero se tiene que editar, porque no puedes pasar del banco al negro en muy poco tiempo porque si no la gente la pierde. La gente no va tan rápido como vas tú. Es, por ejemplo, como el cine. Si a mi me gustan las pelis de terror y me gusta mucho un director y ese director decide hacer comedia o películas románticas pues, a lo mejor, si hace un cambio muy brusco, a mi me va a dejar de gustar. Con el sello es algo parecido. No puedo pasar de la noche a la mañana a editar cosas muy underground o muy experimentales porque voy a perder todo el trabajo que he ido haciendo durante todos estos años. Pero, poco a poco, vamos construyendo lo que si queremos ser y cuesta, porque lo fácil sería seguir haciendo lo mismo, seguir vendiendo y seguir generando dinero. Pero no, hemos decidido ir por una vía un poco más complicada pero sabemos que en un futuro nos va a dar muchas alegrías.”
¿Y cómo es esa transición? ¿Cómo se arma desde la estructura del sello y en qué momento decidiste ir por este cambio?
“Fue hace un par de veranos. En 2016, me reuní con mi equipo y les dije: ‘Chicos, yo no puedo más. No puedo editar más tech house. No lo siento como algo mío, creo que el genero se ha comercializado mucho. El tech house va camino a ser, para mi, el nuevo EDM y yo quiero salir de ahí. Yo no quiero seguir haciendo algo en lo que no creo. No quiero seguir apostando por un producto que, a mi, me parece de poca calidad y que no aporta nada’. Les dije eso y, obviamente, se asustaron porque, cuando a tu equipo le dices que hay que cambiar varias teclas y que hay que irse hacia terrenos desconocidos, obviamente, la gente se asusta. Pero yo estaba convencido que iba a funcionar, que en el futuro la gente iba a escuchar más techno, más underground, y creo que el tiempo me ha dado la razón. Hace algunos años, había menos techno. Ahora, la línea entre comercial y underground es complicada de ver y eso nos ha ayudado a que el sello no pierda masa y que las ventas se puedan sostener. Las ventas en Suara siguen siendo buenas, con la diferencia de que, hoy en día, está editando mucha música que nos gusta y, aunque haya música que no me deja plenamente contento, estamos cada vez más cerca.”
¿Y cómo sentís que lo tomó la gente?
“La gente lo va tomando cada vez mejor. En mis actuaciones, no sólo con el sello, he dado cierto cambio. La música que estoy editando y la música que voy a editar no es la que pinchaba hace unos años. Si escuchas los Suara Podcasts o alguna actuación mía, verás claramente un cambio sustancial. No es de la noche al día porque yo considero que tocando tech house no era el típico DJ de tech house. Siempre he sido bastante ecléctico. A mi me gusta el disco, el funk, el techno, la música oscura… Siempre he intentado darle a varios palos, aunque la gente me conocía más por el tech house y al sello en sí, también. Hemos editado de todo: tech house, deep house, más melódico, techno… Hemos sido un sello que, en Beatport, hemos estado en unos siete géneros. En ese sentido, nadie nos puede decir que somos unos chaqueteros porque nunca hemos llevado la misma chaqueta, siempre hemos ido variando.”
Otra cuestión interesante que también une al techno con su versión más mainstream tiene que ver con Resistance. Has estado presente en varios de sus shows… ¿Cómo lo vivís y cuánto tiene eso de llevar el sonido más underground a grandes públicos?
“Siempre es positivo que grandes marcas confíen en ti. Ya son cuatro fechas que he hecho con ellos este año. Hice Miami, que fue muy positivo, y, a raíz de Miami, me salieron Seúl, Singapur y China. A fines de agosto, tocaré en Ibiza con un line up muy bueno con Stephan Bodzin, Adam Beyer, Sasha, Henry Saiz y varios más. Obviamente, es positivo que las grandes marcas de techno o de este tipo de música te apoyen. Más ahora que, como te digo, estoy en una transición hacia un sonido un poquito más underground. Resistance es una marca muy poderosa que ayuda a que a gente que, a lo mejor, estaba en sonidos más comerciales o en el EDM, pueda sumarse al carro del underground o del techno. Por ese aspecto, estoy muy contento y espero que trabajar con ellos me ayude a seguir creciendo y haciendo lo que me gusta.”
Hablemos un poco del proyecto del álbum, que ya tiene el primer single publicado junto a Thomas Gandey… Dijiste que hace mucho lo venís armando… ¿Hace cuánto?
“Empecé en el 2011. Lo que pasa es que bastantes de los temas que van a salir los hice en esa época, por el 2011 o 12… Lo bueno de ello es que siguen sonando atemporales, actuales. Son temas que, aunque se hicieron hace siete años, de aquí a siete años en el futuro seguirán sonando igual de bien. Una de las misiones que yo tengo con el álbum es esa: que sea un álbum que perdure en el tiempo. Que tu lo escuches de aquí a unos años y siga sonando y te siga gustando. Porque, para mi, los álbumes no son proyectos que edites diez o doce canciones que puedas haber editado en singles. Para mi, el álbum es algo especial y por eso he tardado tanto en armarlo y aún estoy en ello. Estoy acabando. En breve, saldrá un segundo single y, luego, cuatro temas que serán un adelanto. Cuatro canciones muy diferentes entre ellas pero con un nexo común. Solo una de ellas será techno. El resto serán géneros diferentes. Va haber pop, hip hop… Es un álbum que puede recordar un poco a aquellos que se hacían en los noventa en cuanto a sonido, muy ecléctico pero con cierto nexo común. Estoy muy contento con él y no puedo esperar a ver cómo la gente responde. Sobre todo, por eso, porque me ha llevado mucho tiempo y siempre he estado con la duda de cuándo era el momento y si los temas a la gente le podrían gustar, porque es algo muy diferente a lo que haya hecho hasta ahora. Quizás, mucha gente pueda pensar que tal vez podría haberlo editado en un proyecto paralelo al de Coyu porque me conocen más por la música de baile y en este álbum habrán muchos temas que no son de baile. Como te digo, tengo muchas ganas de presentarlo y aunque aún no está del todo acabado, ya le queda bien poquito.”
¿Y cuánto influyen tus diez años de experiencia en un sello, llevándolo adelante, a la hora de lanzar un álbum? ¿Lo ves con la mirada del dueño del sello o con la mirada del artista? ¿Cuánto sirve tener un sello para ver qué va a funcionar del lanzamiento y cuánto es un problema?
“Yo creo que el álbum lo veo mucho más con la mentalidad del artista que del dueño del sello porque, al fin y al cabo, una cosa es Suara y otra cosa soy yo. Y, por más de que Suara sea como mi bebe, y mi proyecto más importante y trabajo día a día para mantenerlo, el álbum es un proyecto en el que llevo trabajando siete años y quiero que me represente a mí, no tanto al sello. Que en un futuro, de aquí a treinta años, la gente lo escuche independientemente si ha salido en Suara o en cualquier otro sello. Si lo viese como dueño del sello, me pediría quitar partes de los temas menos bailables y listeros porque, al fin y al cabo, esos no venden, son para escuchar en casa, y a nivel venta del sello no significará algo importante.”
¿Y de aquí en mas, ¿cómo sigues? Tenemos entendido que no piensas demasiadas cosas por los 10 años del sello…
“No va a haber un disco que rememore los diez años pero sí estamos trabajando en diferentes discos especiales. Nada recopilatorio, al menos en principio. Y, aunque las celebraciones por los diez años acaban de comenzar, habrá doce meses de celebración. Y puede ser que en mayo del año que viene sí salga un recopilatorio. En cuanto a los showcases, estamos trabajando para poder hacer fiestas especiales pero aún no tenemos nada confirmado. Por ejemplo, en Barcelona, que es donde más fuerza tenemos porque somos de aquí, ya hay confirmadas varias fiestas pero tampoco que estén enfocadas a los diez años del sello y, aunque obviamente queremos darle cierta fuerza y simbología a los diez años, tampoco soy una persona muy nostálgica que piense que tiene que estar celebrando un hito como este. Soy mucho más del día a día. No quiero darle mucha más importancia de la que ya tiene porque, a veces, hay muchas marcas o DJs que se enfocan tanto en las celebraciones de los aniversarios que terminan no aportando nada nuevo. Tampoco quiero engañar a la gente y, si no vamos a ofrecer algo diferente, prefiero ir yo de cara y tocar en una fiesta Suara normal.”
Para cerrar, queremos saber sobre tu reciente visita en Latinoamérica… ¿Cómo estuvo, dónde estuviste y cómo la pasaste?
“Como siempre, Sudamérica me ha recogido con los abrazos abiertos. Estuve en Lima, Montevideo y Buenos Aires y la verdad es que disfruté muchísimo. Es donde más cómodo me siento, donde más disfruto como artista. Primero, porque siento el calor y el amor de la gente y porque puedo tocar lo que quiero. Por ejemplo, en Europa me cuesta un poco hacer sesiones largas y en Sudamerica me resulta ideal porque a la gente le gusta, disfrutan de poder escuchar varios estilos en una misma sesión. Particularmente, Argentina es un país perfecto para ellos. Si que es cierto que en Sudamerica toco un poco mas melódico de lo que suelo tocar en Europa, que es más techno oscuro, generalmente. Disfruto mucho poder hacer sesiones más especiales donde haya más melodía y progresión. Que vaya de menos a más y, después, de más a menos. En Europa es todo un poco más directo. Disfruto mucho Sudamerica pero tengo algo en particular con Argentina. Y en Uruguay, últimamente, me siento increíble. En Montevideo esta última vez fue algo increíble, espectacular y ya estoy contando los días para poder volver…”
Fotos: Sandra Blanquez
Entrevista: Hernán Pandelo