Elio Riso: Necesaria expansión

Elio Riso: Necesaria expansión

El DJ y productor argentino analiza el año más extraño de todos.

Artículos | Por Hernan Pandelo | 29 de diciembre de 2020

En la víspera de su regreso a la cabina, hablamos con el DJ argentino Elio Riso sobre un año en el que sus planes se vieron afectados por la pandemia del coronavirus. Tras 21 años de pasar el mes de marzo en Miami para hacerse presente en la Semana de la Música, Elio tuvo que aislarse como todos y solo pudo dedicar su tiempo a la producción musical y a algunos otros proyectos.

Con el inminente regreso a la cabina de Rio Electronic Music, uno de los ciclos que más lo ha visto presentarse en su país natal, nos cruzamos en un zoom para que nos cuente las sensaciones de un año por demás extraño donde la expansión cruzó varios estados de su vida, desde la producción música y la necesidad de presentar otros géneros frente a audiencias nuevas hasta la llegada de un nuevo proyecto externo que le ayudó a mantener la cabeza ocupada.

En primer lugar, queremos saber cómo viviste la pandemia. Estas en Buenos Aires…

“Ahora estoy en Buenos Aires. Llegué hace poco de Barcelona.”

¿Dónde te agarró la pandemia?

“Los primeros tres meses fue algo durísimo psicológicamente. Después, adquirí el permiso y pude ir saliendo de a poco. Circunstancialmente, algo lindo nació gracias a una charla con amigos. Alguien que sabe que me gustan los anteojos me contactó con un amigo suyo que fabrica anteojos. Entonces, en junio tuve una reunión y empezamos a pensar qué queríamos hacer en ese rubro. Hicimos seis pares diferentes de anteojos y tuvieron una gran recepción. Los tuvimos en la mano recién en septiembre. Todos hechos en Argentina, algo que, como estamos en Argentina, es muy importante. Si bien hay cosas importadas, como el lente, del cual depende el dólar, el resto es todo producto argentino.”

Y respecto a la música y tu carrera… ¿Cómo fueron esos días?

“El 7 de marzo fue la última fecha que toqué, en La Plata. El 10 recibí la mala noticia de que se cancelaba el Ultra. Ahí, empecé a averiguar con gente de Miami, porque yo tenía programados cuatro eventos más. Me dijeron ‘no vengas que esto está todo mal’. Con el Ultra cancelado, todo se iba a ir cancelando. Entre el 13 y el 20, cada vez hubo más problemas, hasta que se cerraron las fronteras. Fue una gran resignación. Desde 1999 que voy a Miami, ya sea Miami Week, Winter Music Conference y todos los nombres que fueron pasando de moda. Y desde el 2003 que voy con Ultra. Todo se volvió muy extraño con esta incertidumbre.”

¿Y cómo afrontaste ese momento tan extraño? Empezaste con un proyecto nuevo, ¿verdad?

“El tema de los anteojos me ayudó. Se llaman WhyNot? by Elio Riso. La idea era dedicarme a algo en lo que no veo a nadie de la industria electrónica esté haciendo, para la gente del mundo electrónico. Tienen algunas opciones diferentes para clubbers, con tonos más claros y más oscuros. Es algo que me divierte. Fue con la idea de buscarle la vuelta a algo que vi que nadie estaba haciendo. También me hizo ver que uno llega a una edad en la que se empieza a preguntar qué pasa después de ser DJ.”

Elio Riso

¿Y qué pasa? ¿Fue la pandemia la que te empujó a ese pensamiento o lo venías analizando desde antes?

“Creo que la pandemia me marcó algunas cosas. Fue como un aviso: ‘Empezá a mirar otras cosas’. Nada me llega como la música.”

¿Y qué te llena de la música?

“Principalmente, tocar. Producir me gusta pero por momentos. Tanto tiempo de estar produciendo te quema un poco y después no dura nada. Hay tanta música que lo pone tres veces y listo.”

Entonces, te identificas más como DJ.

“Si, pero el DJ que hoy no produce es uno más. Como dicen en España, un pincha discos. A mí me gusta armarme algunos bootlegs y tener cosas que no tiene nadie más. O mandarlo a artistas como Carl Cox, Pete Tong o Laurent Garnier. A muy pocos que son top en mi consideración…”

¿Y pudiste dedicarle a la producción esta pandemia?

“Si, produje. Entre todo eso, me anoté en Hello Demo, que es una nueva plataforma para mandar demos y la misma aplicación los distribuye a los sellos que están anotados. Tiene llegada a diferentes plataformas. Entre los concursos que hicieron, yo mandé para dos, porque me interesaban esos sellos. Pero la tercera fue la vencida. Participé con el sello de Buschwacka, a quien siempre admiré porque es un gran artista que no solo fue DJ y productor sino que también tuvo mucho que ver con la escena inglesa, siendo dueño del mítico club The End. Es un tema que suena a rave de los noventa, muy old school. Nos juntamos con Hernan Paredes e hicimos un sonido rave. Cumplí como uno más y llegó el día que elegían los remixes. Me llamaron y me dijeron ‘Matthew Bushwacka está hablando de vos’. Puse la transmisión y escuché que habíamos ganado. Finalmente, el track se editó en el sello de Bushwacka en vinilos, lo cual es un premio mayor porque, en este mundo digital, está bueno que te quede algo. Una caricia a tanto tiempo dedicado.”

También tuviste una caricia de parte de Carl Cox, ¿verdad?

“Si, Carl Salió en el puesto N°2 del Top 100 DJs Alternativo de DJ Mag y eligió, como track del año, una producción que hice con Vikthor, un artista napolitano con el que solemos hacer algunas cosas a través de internet. Es joven y es un gran talento de la nueva generación, con el que, cada tanto, generamos algo nuevo.”

Es imposible no profundizar sobre tu relación con Carl. Te ha apoyado incontables veces… ¿Seguís sintiendo lo mismo cuando él destaca tu trabajo?

“En el 2003 empecé a trabajar con Carl pero recién en el 2008 mandó a alguien a preguntarme por qué no le mandaba música. Yo trabajé cinco años con su grupo sin tener contacto con él. Iba a Ibiza y trabajaba para su fiesta pero en otra pista, otra área. Él, en ese momento, ponía techno mucho más poderoso. Para mí, era mucho porque yo iba a Ibiza y lo tenía más relacionado con el sonido baleárico y el house old school, más americano. Entonces, cuando me mandó a pedir música, desde ahí tuve contacto con él y empecé a darle música.”

Y las colaboraciones también han sido parte importante de tus éxitos más recientes… ¿Es algo que hiciste siempre o es más actual?

“Tuve momentos que produje solo, después empecé a producir con gente, por el hecho de que, estando solo, me aburro. Me pongo muy reiterativo. Entonces, de a poco, voy conociendo con diferentes productores, a ver con quien conecto. Es prueba y error. Entonces, en esa prueba y error, vas viendo qué conexión tenés. No prometo nada. Nos la jugamos, a ver qué sale. Con algunos salen cosas buenas, con otros se trabaja y se deja de trabajar. A mí me gusta hacer cosas diferentes, no me encierro en un género. Nunca engancharme atrás de lo que está de moda, siempre estar cerca.”

“Hits pone cualquiera, el tema es sorprender.”

A veces, se siente que sos muy consciente de lo que está de moda y no querés estar tan ligado a eso…

“Totalmente. Trato de hilar fino sin pasarme de la línea. Hits pone cualquiera, el tema es sorprender. Para poner un hit, te pongo un bootleg, que tiene un factor sorpresa.”

Si tuviéramos que poner en porcentajes cuánto querés hacer bailar y cuánto sorprender, ¿qué dirías?

“Hacer bailar sería el 85%. Pero es importante entender que hacer bailar no es estar con la manito arriba todo el tiempo. Por ejemplo, este fin de semana voy a ir a Rio a tocar en un formato nuevo, que es completamente diferente, en modo bar. No es lo mismo. No voy a poner ni techno ni house. Voy a poner sonidos más orgánicos, algo de nu disco y de funk. Es importante saber en qué contexto va a estar la gente. Ahora se puso de moda el tech house, todos tocan tech house. Si voy a poner música a un lugar donde están todos sentados, no puedo intentar hacerlos bailar con tech house. Voy a tocar algo diferente. Me adapto al lugar, en una terraza y al aire libre. Me interesa pensar que ellos vienen esperando escuchar lo que pongo siempre y los tengo que sorprender.”

¿Lo vivís como un desafío?

“Si porque la gente suele acostumbrarse. Pero la verdad es que, sacando algún tema mío que puedo llegar a repetir, no pongo lo mismo. Y, si lo pongo, es porque es algo que hice yo. Está bueno hacer algo diferente. Lo fundamental, siempre, es conectar con la gente.”

¿Es el primer set que tocás desde que inició la pandemia? Imaginamos que tenés mucha música para poner…

“Tengo carpetas armadas desde marzo. Tenía preparadas carpetas para Ultra y las otras fiestas de Miami. Puedo tocar 24 horas tranquilamente, pasando por muchos estilos. Es importante poner diferentes cosas. Podés equivocarte en alguna selección pero es prueba y error. Esa es la diferencia entre un DJ profesional y un DJ amateur que suena todo igual.”

¿Fuiste afinando esa sensibilidad para prueba y error con el tiempo? ¿Te equivocas menos?

“Es prueba y error pero, con el tiempo, cuando lo ponés, te das cuenta qué le faltó, o qué necesita. No hay nada mejor que poner lo que producís y ver la reacción de la gente.”

“No hay nada mejor que poner lo que producís y ver la reacción de la gente.”

¿Preferís poner un tema tuyo y que la gente lo festeje o que lo ponga Carl Cox y ver la reacción de la gente cuando lo pone él?

“Soy medio extraño para eso. Cuando lo estoy haciendo, lo voy probando y, cuando se editó, o ya tiene sello, lo dejo de poner. Y, ahí, cuando ves que lo pone otro, está buenísimo. Ya lo soltás.”

Cerremos con Rio, que vamos a estar compartiendo el set de tu regreso con nuestros lectores.  ¿Te sentís cómodo ahí?

“Si, muy cómodo. Es la terraza de Buenos Aires en la que hace ya 7 años estoy tocando. Creo que soy uno de los más viejos… Tenemos una excelente relación, un gran ida y vuelta.”

Elio Riso

¿Cuál es tu fiesta ideal? Horario, lugar, capacidad…

“Hace rato me gusta tocar de día. Yo vengo de la terraza de Space. Ibiza y Space a mí me marcó mucho. Siempre digo que aprendí de muchos DJs por verlos. El carisma de Carl Cox, la selección musical de Steve Lawler… De todos fui sacando algunas cosas. Me gusta ir a ver y escuchar, para aprender de lo bueno y saber qué es lo que no tengo que hacer.”

Es más importante saber qué es lo que no hay que hacer…

“Totalmente. Porque yo tengo mis locuras y, a veces, hago cosas que son extrañas, y la gente reacciona bien. Es importante saber hasta dónde puedo ir.”