Julián Salazar y Franklin Tejedor son las dos personas que se esconden bajo el proyecto Mitú, un proyecto que todo el tiempo está rompiendo fronteras con su sonido de la selva, un sonido que cautiva y emociona cuando se les ve en vivo interpretando cada producción.

Ellos, que el año pasado tuvieron el honor de ser invitados a abrir el show de New Order en Londres, se caracterizan por crear encuentros sonoros mediante su música, donde el techno y el ambient se mezclan de forma perfecta con la música palenque, shoegaze y pop, convirtiendo el proyecto admirable lleno de ímpetu y experimentación.

Aprovechando el reciente lanzamiento de “Tandem”, conversamos con Julián.

Cuéntenos cuál fue la idea de desarrollar este nuevo álbum.

“La idea nuestra era darnos un poco más de tiempo y no trabajarlo con toda esa crudeza y prisa que a veces nos hemos impuesto un poco en el ritmo de trabajo para que las cosas queden tal cual fueron imaginadas en un primer momento. Darnos un tiempo para reimaginar un poco el espectro musical en el que nos movemos y traducir muy bien en las canciones los momentos personales que afectan la composición del álbum entero.”

¿Qué máquinas/instrumentos o herramientas utilizaron esta vez para la realización del álbum?

“Las máquinas e instrumentos que usamos vienen siendo los mismos sintetizadores, drum machines, tambores y percusión electrónica que hemos usado a lo largo de nuestra carrera. En esta ocasión, de parte de Franklin se incorporó la batería acústica y bajo en algunos temas y, de mi parte, utilicé la guitarra eléctrica y acústica que hace rato no había tocado, y de hecho no había implementado eso en Mitú.”

Cuéntenos un poco sobre la historia detrás de las pistas que componen el disco.

“Creo que las canciones del disco tienen un hilo conductor bastante claro. Para mí es un disco de amor, que habla de amor propiamente. Es algo así como una declaración. Todas vienen cobijadas por ese mismo aire. No hay alguna en particular que se salga dentro de eso. De hecho, las instrumentales evocarían también momentos donde valen más los hechos o los sonidos.”

“Creo que las canciones del disco tienen un hilo conductor bastante claro.”

¿Cuáles fueron algunos de los desafíos creativos más importantes que tuvieron al momento de crear y dar con el tono de voz para el disco?

“Creo que el desafío más grande fue conseguir las voces apropiadas para cada tema. En este hubo que hacer un voto de paciencia y que fueran apareciendo. Antes habíamos trabajado con la misma voz que nos había acompañado. Hubo que ir buscando a cada canción ese mejor timbre y/o vocal que le pudiera ir bien. Ese diría, fue el desafío más grande que tuvo el disco.”

¿Qué los llevó a decidir incluir más letras y vocales en este álbum, en comparación a sus trabajos discográficos pasados?

“Creo que la decisión de incluir más vocales en este disco se trata de que, al momento de ir haciendo las canciones, fueron viéndose estos espacios donde podía caber bien una interpretación de voz y, como decía anteriormente, se trata también de una declaración. Siento que a la música le venía bien tener cierto complemento, cierta compañía de una parte vocal de letras.”

¿En qué entorno o situación les gustaría escuchar este nuevo álbum?

“A mí me gusta oír la música montando bicicleta. Creo que me gustaría mucho oírlo montando bicicleta y aún no he tenido la oportunidad.”