Hernán Costas entrevistó a Joel Silva, quien desde hace varios años lleva el proyecto de Under Club promoviendo el techno en todas sus variantes.

Buenos días Joel. Me gustaría iniciar la charla haciéndote una pregunta para aquellos que aún no conocen tu historia. ¿Quién era Joel antes de comenzar con el proyecto que luego ayudó a definir el futuro de la escena porteña y sudamericana?

Tuve la suerte de contar con mis padres que pudieron bancarme hasta finalizar la secundaria y en ese momento decidí no iniciar los estudios en una universidad, entonces empecé a trabajar a los 18 años en una librería y luego en una fábrica hasta los 24 años. La pregunta era: ¿qué beneficios me puede dar venir todos los días 9 horas o más a un sitio donde no soy feliz, que solo me da dinero una vez al mes? Me parecía un montón para mis 24 años, y la respuesta estaba muy a la vista. Esto me llevó a empezar un camino en la discoteca Bloody, donde al poco tiempo iba a empezar a organizar cada uno de sus sectores.

¿Cómo fue tu acercamiento a Bloody? ¿Y tu crecimiento allí?

De chico iba a bailar casi todos los fines de semana a Bloody y es por eso que fue una experiencia hermosa. Pasar a organizar un sitio donde viví muy lindos recuerdos fue algo que me marcó, y estoy muy agradecido por todo lo que aprendí, y por dar mis primeros pasos en la escena de la música electrónica. Y también por poder trabajar con artistas locales e internacionales, que con algunos de ellos hoy lo sigo haciendo.

¿En lo personal, cómo viviste el traspaso de Provincia hacia Capital Federal? ¿Y qué te motivó a tomar esa decisión?

Fue bastante duro por varias razones. En primer lugar, no solo fue un traspaso, sino que también el ser dueño de un espacio como el Club te invita a tener otro tipo de responsabilidades. Sumado a esto, no contábamos con el público de la Capital Federal, entonces empezamos a afrontar números rojos. Creeme que fue muy fuerte el proceso que se vivió, pero nos hizo muy fuertes y nos dio muchas herramientas. La decisión se tomó porque sentía que había que crecer, y fue acertada. Pero no creí nunca todo lo que íbamos a vivir para hoy poder estar festejando nuestros primeros 11 años de vida.

Para el primer evento en Under Club donde se presentó Nina Kraviz, había varias personas escépticas respecto a si la fecha era real o no, de hecho yo era una de ellas. Remontándonos a febrero del 2014, ¿cuál fue la historia detrás de ese booking tan ambicioso? ¿Experimentaron algún contratiempo?

Bueno, ¡podría decirte que ni yo lo creía jaja! No sé si alguna vez leíste esa frase que dice «el peor resultado es no intentarlo». A mí siempre me hizo mucho sentido esta frase, es como parte de Under Club. Mi idea en 2014 era alquilar un sitio solo una vez al mes, y así fue la idea de la búsqueda. No habían pasado 30 días de eso que pasé a ser dueño de un Club, y a los 5 días siguientes se presentaba Nina Kraviz junto a Xhei, y al otro día Pfirter 7 horas. No tenía ningún respaldo económico, no tenía experiencia en manejar un Club, pero tenía un sueño muy claro y muchas ganas de crecer. Nina venía a Cocoliche, que se encontraba cerrado, y esto me llevó a hablar con su agencia para dar nuestro primer paso en Capital Federal con su presencia. El tema es que estábamos a 10 días de su presentación nada más, y no contábamos con los papeles del Club como para poder abrir. Pero en cuestión de días todo se fue solucionando y hoy podemos decir que fue un acontecimiento histórico para la escena de nuestro país, porque Nina Kraviz mezclando discos 4 horas en un Club pequeño, está claro que no sucede todos los días.

He escuchado algunas historias alocadas acerca de los primeros años de vida del Club. ¿Cómo describirías los inicios de Under Club en términos de cómo se llevó a cabo la gestión? ¿Cuáles fueron las experiencias más memorables en este periodo?

Estaba viviendo el sueño del pibe, era muy fuerte poder disfrutar artistas que eran tus ídolos en el Club, cenar con ellos, saber de sus vidas y hasta generar una amistad. Cada noche era única, desde eventos donde solo asistieron 20 personas, a noches como la de Oscar Mulero y Zadig con el Club repleto y sin ventilación por fallas en la electricidad de la cuadra. Pasaron cosas muy locas, pero muy lindas a la vez. Los dos primeros sistemas de audio eran malísimos y las potencias calentaban y se cortaba el sonido, pero la verdad es que no teníamos el dinero para mejorarlo. Pasaba a ser todo mágico porque sucedían cosas sin contar con los recursos necesarios, entonces se valoraba todo aún más. DJs de todas partes del mundo querían vivir su experiencia en Under Club, y esto era muy loco porque el sistema de audio estaba muy lejos de lo que en ese momento podías encontrar en cualquier Club de Europa. Pero bueno, podría decirte que amor siempre sobró.

¿Cuál dirías fue el punto de inflexión donde tanto el Club como el equipo comenzaron a profesionalizarse? ¿Y a qué se debió este cambio de perspectiva?

Un año antes de la pandemia dimos un gran paso que fue comprar el sistema de audio Funktion One. Para mí en ese momento comenzó una nueva etapa y todo fue mejorando con el pasar de los días. Fue notable la respuesta del público, y eso fue una inyección de felicidad para quienes formamos parte del Club. No hay nada más lindo que sonar bien y que el público pueda disfrutar como merece, tanto a sus artistas, como al sitio al cual elige ir, y también podríamos agregar la importancia de cuidar los oídos de todos los que estamos dentro de la sala.

En febrero del año pasado Under Club cumplió 10 años de vida. Imagino debe ser difícil escoger, pero si tuvieras que elegir tres hitos que definieron o marcaron una diferencia en el futuro del Club, ¿cuáles seleccionarías y por qué?

Sin dudas es muy difícil, pero la apertura con Nina Kraviz, el B2B de Oscar Mulero y Zadig, la primera visita de Ben Klock, y el especial de Jefff Mills en Bloody, fueron 4 noches que daría lo que fuera por volver a vivir. En todas sucedieron cosas que tuvimos que resolver en cuestión de horas, y todas fueron increíbles.

Sin una visión, un liderazgo definido y un equipo que acompañe, no hay Club que logre sobrevivir. ¿Qué cosas destacas de las personas que forman parte de Under Club? Tanto los actuales como aquellos que tomaron otros caminos.

Hay una especie de regla en la familia del Club, y es que debes amar el lugar. Obviamente no podemos obligar a alguien a eso, porque es algo que debe nacer naturalmente, pero quien lo hace es quien realmente se compromete con lo necesario para poder ver al Club crecer. En lo personal, siento que mi vida no tendría sentido si no fuera por la responsabilidad de llevar el Club adelante. Sé que cuento con una segunda familia y es algo muy gratificante para mí, porque esta familia fue elegida y comparte una misma visión.

Febrero de este año es un mes sumamente importante, ya que Under Club celebra su aniversario n° 11. ¿Qué nos podés adelantar respecto a lo que se viene en este 2024?

Estamos a punto de lanzar nuestro sello discográfico. Junto a Fausto (residente) vamos a estar trabajando en Under Club Records. La idea es invitar a productores nacionales e internacionales a que sean parte del sello. También estaremos realizando 5 o 6 encuentros fuera de nuestro Club. Justo acabamos de llevar adelante el primer encuentro en Club Deseo, donde se presentaron Anetha, Matrixxman y Cia Rebeck. Y llegando a fin de año nuevamente vamos a realizar nuestro tour por Europa. Hay algunas otras cositas, pero todavía no están confirmadas, así que esperemos a que se concreten y luego las compartiremos.

No te pierdas la agenda de Under Club a lo largo de su aniversario con presentaciones de Héctor Oaks, Trym, Shlømo, Perc, Rødhåd, Dax J, y Oscar Mulero, junto a residentes y diferentes talentos locales haciendo clic acá.