Nacido en Mar del Plata, Agustín Giri ha logrado consolidarse como uno de los nombres más interesantes de la escena electrónica argentina y mundial. En esta entrevista exclusiva con DJMAGLA, el artista comparte su viaje desde la costa atlántica hasta los escenarios internacionales, sus hitos musicales y su perspectiva sobre la evolución de la industria.
¿Cómo crees que Mar Del Plata influyó en tu sonido y en tu carrera? ¿Cómo ves la relación entre la escena electrónica latinoamericana y la europea? Haber nacido en Mar del Plata es algo de lo que estoy muy agradecido, tanto a nivel personal como artístico. Hablando sobre mi carrera, siento que, al ser una ciudad más chica (comparada a Capital), hay más oportunidades, ya que es más “fácil” llamar la atención de los clubes y productoras. En cuanto a mi sonido, no sé qué tanto influyó; creo que ahí sí influyó más Buenos Aires, cuando venía desde Mar del Plata a escuchar a los artistas que me gustaban o me daban curiosidad. Hace 2 años, me mudé a Buenos Aires y fue un movimiento clave para seguir desarrollándome como artista. Hace casi un año que trabajo con Sol Solar y estoy muy feliz de poder trabajar con ellos; son muy profesionales y, sobre todo, grandes personas. Quiero hacer una mención especial para Andrés Rego; él fue la primera persona en confiar en mí en Buenos Aires y, en poco menos de un año, me enseñó muchísimo. Lo vamos a extrañar mucho.
La relación entre ambas escenas creo que es muy valiosa, ya que constantemente hay un intercambio de nuevos sonidos y talentos. En general, creo que los sonidos que se escuchan en Europa hoy, tal vez se hagan populares en Argentina en un par de años; aunque hoy en día, con las redes sociales, la escena en general se homogeneizó. Hablando específicamente de Argentina, depende todo del enfoque que se le ponga; podríamos “quejarnos” de que la escena está cada vez más comercial, o podemos enfocarnos en que cada vez más gente consume más música electrónica, y eso llevará a que en el futuro se le dé más lugar a otros sonidos no tan comerciales. Ahí es donde tal vez veo la mayor diferencia con la escena europea, en donde está lo main/comercial, pero también hay una gran movida alternativa. Cabe destacar que no hay como el público argentino; eso es algo que me asombró mucho cuando comencé a viajar a tocar a otros lugares.
“Transient Enigma» en Innervisions y «Not Now» en Nervous Records son hitos en tu carrera. ¿Cómo fue el proceso de llegar a sellos tan icónicos y qué significó para vos lanzar en ellos? Es gracioso porque fue muy diferente con cada sello.
Innervisions es, desde hace muchos años, un sello que me inspiró mucho y me moldeó como artista. Estuve trabajando durante mucho tiempo en mis producciones hasta que sentí que ya estaba al nivel para enviarles. Así que empecé a mandarle a Âme (Kristian); le habré enviado en 2 años unos 35/40 tracks, de los cuales pinchó varios, hasta que un día me dijo que le gustaría firmar “Transient Enigma”.
En cambio, con Nervous fue todo muy diferente; un día estaba escuchando mis demos y escuché «Not Now» (lo tenía olvidado), que originalmente tenía unas vocales de Biggie, y se me ocurrió mandarlo a Nervous. No esperaba sellarlo, ya que no es un track de house, pero algo me decía que podía gustarles y así fue. Lo envié simplemente para probar y, a la media hora, el A&R de Nervous me dijo que lo querían lanzar.
Ambos releases fueron súper importantes para mí, ya que son sellos discográficos legendarios: por un lado, Innervisions, que fue y sigue siendo una guía para mí, y, por otro lado, Nervous, que nunca lo imaginé y, a la vez, me motivó a seguir haciendo la música que me salga, ya que nunca se sabe dónde terminará saliendo.
Has colaborado varias veces con Juan Hansen, ¿cómo nace esta conexión y qué aporta cada uno a los tracks que crean juntos? Con Juan compartimos muchas fechas ya, y siempre hubo mucha buena onda. Una de las últimas que compartimos fue en Mute, en Mar del Plata, y ahí dijimos que teníamos que hacer música juntos. No soy de hacer muchas colaboraciones, excepto que haya una amistad de por medio, y así lo sentí con Juan. Nos complementamos muy bien; él es un gran músico, súper creativo y con muchas ideas. Así que fue fácil trabajar juntos; fluyó muy rápido. Primero hicimos “Sentir Así” a la distancia y, cuando nos juntamos para terminarlo, nos pusimos creativos y empezamos “Hurting”; en 3 o 4 sesiones ya teníamos ambos tracks terminados. Y hay más en proceso…
En abril vas a lanzar un EP en Just This con un remix de Robag Wruhme y en octubre llega tu primer álbum con Rummel. ¿Cómo fue trabajar con un artista con tanta trayectoria como Robag? ¿Qué nos podés adelantar sobre tu álbum y cómo fue el proceso de creación en comparación con un EP o single? Así es; en abril sale mi próximo EP en colaboración con Gespona en “Just This” label de Hunter Game. Robag es un productor que admiro mucho por su originalidad, así que, cuando firmamos el EP con Gonza (Gespona), dijimos que nos encantaría un remix de él, y así fue. Estamos muy contentos con este release, ya que es nuestro primer EP en colaboración.
La idea del álbum surgió hablando con Gespona y Djolee (dueños de Rummel y grandes amigos), ya que tengo mucha música de diferentes BPMs, intensidades y géneros (desde ambient a techno). Nos pusimos a imaginar un posible tracklist y nos dimos cuenta de que quedaba muy bien y con mucho sentido. En este momento estoy en el proceso final de varios de los tracks. Espero que les guste.
Amancay se ha convertido en una plataforma clave en la escena argentina. ¿Cómo surgió la idea y cómo ha evolucionado con el tiempo? ¿Cuál es la visión a futuro del proyecto y en qué se diferencia de otros colectivos? Amancay, antes de ser Amancay, era un grupo de Whatsapp en donde hablábamos mucho de música; nos dábamos consejos y feedbacks de nuestros tracks. Un poco en chiste y un poco no, surgió la idea de crear una especie de sello para lanzar nuestra música, y así sucedió. Ya vamos 4 años trabajando en este hermoso proyecto. Año a año seguimos creciendo, tanto como sello como cada uno en su proyecto personal.
Nuestro objetivo es seguir creciendo y poder dejar una huella en la escena argentina. Trabajamos para eso y así lo seguiremos haciendo.
No sabría decir en qué nos diferenciamos de otros colectivos, pero puedo decir que en Amancay somos un grupo de amigos que nos apoyamos día a día en cuestiones artísticas y personales, y ahí creo que está lo más lindo que tenemos: la amistad.
En los próximos meses vas a tocar en Berlín, Estambul, Dubái, Barcelona y más ciudades. ¿Cómo ves la recepción de tu música en distintas partes del mundo? ¿Hay alguna ciudad o club en particular que te haya marcado? La verdad que estoy muy contento con la recepción de mi música en el mundo. Como productor, me gusta mostrar diferentes facetas para que diferentes personas puedan conectar con lo que hago; en algunos lugares les gusta la música más amigable y, en otros, la música más “rara” o oscura. Como DJ, siento que es muy importante saber contarle al público lo que uno quiere contar.
Cada ciudad es diferente; ahí es donde creo que es muy importante saber leer el contexto y al público. No es el mismo en Dubái que en Berlín y ese desafío es el que más disfruto a la hora de pasar música. Más allá de esto, me siento muy afortunado de poder conocer diferentes culturas en cada viaje que hago.
Como dije antes, de todas las ciudades y clubes me llevo algo; pero hubo dos lugares que me marcaron mucho: uno fue “Kater Blau” en Berlín y, por otro lado, “Garden of Dreams”, un festival que se hace en Bosnia y Herzegovina.
Argentina tiene una fuerte cultura de música electrónica, pero también grandes desafíos para los artistas emergentes. ¿Cuáles creés que son los mayores retos y oportunidades para un productor hoy en día? Creo que, post-pandemia, la escena global cambió bastante; muchos más productores y muchos más DJs, por lo tanto, es difícil captar la atención. Me parece muy importante entender que no alcanza con solo ser buen productor o buen DJ; hoy en día hay muchas otras cuestiones en juego que hay que tomar en consideración a la hora de querer ser parte de la escena, como, por ejemplo, redes sociales, saber manejarse y ser profesional. Dicho todo esto, no hay que dejar de ser auténtico y real a uno mismo; saber nuestros propios límites y respetarlos.
Trabajo, constancia y saber aprovechar las oportunidades me parece lo más importante; la suerte juega un gran papel también.
Con una visión clara y un sonido en constante evolución, Agustín Giri continúa dejando su huella en la escena global, llevando su música a nuevos territorios y consolidándose como uno de los talentos más prometedores de la industria de la musica electrónica. Desde su primer contacto con la electrónica en Mar del Plata hasta sus lanzamientos en sellos icónicos y su expansión internacional, su historia es un testimonio de pasión, trabajo y dedicación. Con un 2024 cargado de novedades, incluyendo su esperado álbum debut, su viaje está lejos de detenerse. Nos queda claro que lo mejor de Agustín Giri aún está por venir.