El show de medio tiempo del Super Bowl LIX, celebrado el 9 de febrero de 2025 en el Caesars Superdome de Nueva Orleans, pasará a la historia como una de las presentaciones más emblemáticas del evento. Kendrick Lamar, el aclamado rapero de Compton y ganador de cinco premios Grammy, se convirtió en el primer artista en solitario del género en encabezar este espectáculo. Su actuación no solo celebró su legado, sino que también reflejó la intensidad de su enfrentamiento con Drake, una rivalidad que ha sacudido la escena del hip-hop en los últimos meses.
Desde el primer minuto, Lamar dejó en claro que su presentación sería un viaje a través de su identidad y raíces. Con un despliegue visual impactante que representaba su ciudad natal, interpretó once de sus temas más icónicos, incluyendo «Euphoria» y «All the Stars». Cada canción fue una pieza de su evolución artística, abordando tanto sus triunfos como las adversidades que ha enfrentado en la industria.
El clímax de la noche llegó con la interpretación de «Not Like Us«, la canción que ha sido centro de la disputa con Drake. Antes de iniciar el tema, Lamar lanzó un comentario que avivó la polémica: «Quiero cantar su canción favorita, pero saben que le encanta demandar», en referencia a la batalla legal entre ambos. Aunque omitió la línea más controvertida, «pedófilo certificado», la esencia de la crítica se mantuvo intacta. El estadio estalló en euforia, consolidando el impacto de la canción dentro y fuera del escenario. En las horas posteriores a la presentación, «Not Like Us» experimentó un aumento de más del 430% en Spotify, convirtiéndose en la canción con mayor crecimiento de la noche y reafirmando su posición como un fenómeno cultural y comercial.
La actuación estuvo llena de referencias culturales y políticas. Samuel L. Jackson apareció vestido como el Tío Sam para introducir a Lamar, agregando una capa de comentario social a la presentación. La participación de SZA y la tenista Serena Williams aportó un dinamismo especial al espectáculo. Un detalle que no pasó desapercibido fue el collar con la letra «A» gigante que Lamar llevó puesto, interpretado por muchos como una referencia directa a Drake, cuyo nombre real es Aubrey.
El show de Lamar también sirvió como un reflejo de la historia del hip-hop en la cultura estadounidense. Si bien el género fue una vez marginado por los medios tradicionales, el hecho de que el Super Bowl —un evento profundamente arraigado en la identidad estadounidense— haya sido encabezado por un artista de hip-hop reafirma su estatus como una de las formas de expresión más influyentes en la actualidad. A lo largo de los años, figuras como Dr. Dre, Snoop Dogg y Jay-Z han allanado el camino para que artistas como Lamar ocupen un lugar central en el evento deportivo más visto del país, un hito que representa la evolución de la música y su integración en la cultura pop dominante.
La enemistad entre ambos artistas tiene más de una década de historia, pero escaló a un nivel sin precedentes en 2024 con el lanzamiento de «Not Like Us». En este tema, Lamar acusa a Drake de conductas inapropiadas, lo que llevó al rapero canadiense a demandar a Universal Music Group por difamación. La controversia explotó en redes sociales y medios de comunicación, convirtiéndose en uno de los conflictos más mediáticos del hip-hop en años recientes.
Tras la actuación, «Not Like Us» arrasó en las plataformas de streaming, consolidando su éxito comercial y reafirmando el estatus de Lamar como una de las voces más influyentes del género. Mientras tanto, Drake ha mantenido un perfil bajo en medio de la tormenta mediática, dejando la puerta abierta a nuevas respuestas o acciones legales en el futuro.
Más allá del enfrentamiento con Drake, la actuación de Kendrick Lamar en el Super Bowl LIX fue un testimonio de su poder artístico y de su capacidad para convertir su música en una declaración cultural. En un espectáculo donde cada elemento fue cuidadosamente diseñado para transmitir un mensaje, Lamar demostró por qué sigue siendo una de las figuras más importantes del hip-hop en la actualidad.