La compañía dueña del festival belga ha firmado un contrato con la provincia de Antwerp que le permite expandir el famoso espectáculo por dos semanas consecutivas hasta el año 2033. ID&T, la empresa organizadora, pagará unos 630.000 euros anuales para llevar adelante el acuerdo.
Los pueblos de Boom y Rumst han experimentado beneficios económicos innegables gracias a la presencia de Tomorrowland con el paso de los años. De hecho, el alcalde de Boom, Jeroen Baert, describió el efecto que tuvo el espectáculo en el área: «Tomorrowland ha puesto a nuestro pueblo en el mapa».
Su colega del pueblo vecino aseguró estar contento con la decisión, expresándose orgulloso de que los organizadores cuenten con ellos para realizar sus eventos. «La demanda de tickets siempre va en aumento», expresó.
El contrato sera revisado año a año y, si existe alguna falla de parte de ID&T, podra ser anulado. Mientras tanto, ya aparecieron los primeros locales que se quejan, alegando que las multitudes que se hacen presentes perjudican la tranquilidad de sus vidas.